El acuerdo, alcanzado tras semanas de negociaciones en Qatar, promete la liberación escalonada de decenas de rehenes retenidos por Hamás. Pero Israel ha cedido a la liberación de cientos de criminales y terroristas palestinos recluidos en cárceles de Israel.

Una vez que el gobierno de Netanyahu apruebe el acuerdo, 33 de los casi 100 rehenes restantes se reunirán con sus seres queridos en las próximas seis semanas. Los rehenes llevan retenidos en condiciones brutales desde octubre de 2023, sin acceso a inspección médica ni contacto con el mundo exterior. No está claro cuántos de ellos siguen vivos.

El alto el fuego también permitiría a cientos de miles de desplazados en Gaza regresar a sus hogares.

Antes de que se anunciara el acuerdo, muchos israelíes expresaron su oposición a los aspectos controvertidos del plan. Otros se sintieron alentados por algunos de los objetivos prácticos del acuerdo propuesto.

Trump se achacó la obtención del acuerdo de este miércoles: "Tenemos un acuerdo de rehenes gracias a nuestra victoria en noviembre", escribió el mandatario en su red Truth Social. El presidente electo de EE.UU. afirmó que el "épico" acuerdo de alto al fuego solo pudo alcanzarse gracias a su elección, y promete trabajar con Israel para garantizar que Gaza "nunca vuelva a ser un refugio terrorista".